No llego a entender como después de todo, de todo lo que me esfuerzo por conseguir que sonrías, que te olvides de lo dura que es la vida vayas y me hundas, a mi, la que creo que no lo merezco.

No merezco tu tono borde y seco, cuando alzas la voz, cuando me acusas de cosas que ni siquiera dije para que no te pongas mal. Yo intento mirar por ti. No te obligué a nada y me tratas como la causa de todos tus problemas y no es así.

Estoy cansada de que juegues a 2 bandas hablando como más te conviene en cada situación y después de escuchar la conversación que no tendría que escuchar o que tu pensabas que no estaba escuchando, me decepcionaste muchísimo. Yo creo que todo lo que hice no lo hice por mal y a veces no iba desencaminada.

Lo conseguiste, conseguiste que ahora me distancie de ti. Por que? porque tu fuiste quien empezaste con esta actitud, no fui yo quien cambie, fuiste tu; ya que es muy fácil tirar la piedra y esconder la mano.

me decepcionaste.