De pequeña siempre me contaban los cuentos con finales felices, de aquella blancanieves que llegó su principe azul a despertarla o cenicienta que encontró a su principe azul y vivieron felices y comieron perdices.
Pues ya me cansé, me cansé de escuchar que existen cuando no, cuando sueñas con ellos y nunca aparecen. Por eso contaré mi propia historia.
Una historia donde no existan animales cantarines, ni hermosas damas que encuentran el amor, ni principes azules enamoradas de aquellas damas hermosas...
Mi cuento irá sobre una chica normalilla una entre un montón de gente, que se siente bien viendo a los demás como intentan buscar ese final feliz que nunca llega, mientras que ella intenta olvidarse de aquellos que le hicieron daño por diversión.